La Biblia Como Palabra de Dios
Cuando queremos referirnos a la Biblia, nos sorprende la cantidad de versiones que encontramos y todas ellas son diferentes, a pesar que nos hablan de lo mismo: Dios y el hombre hacen historia de salvación.
Lo extraordinario de todo es que el ser humano desde siempre ha querido comprender mejor el mensaje escrito y transmitido en la Biblia, con el único fin de hacer más comprensible el mensaje de Dios contenido en la Biblia.
Es el Espírito Santo el que sigue inspirando (motivando) a los hombres en todos los tiempos, como lo dijo Jesús, nos permite poco a poco la comprensión total de su palabra (Jn. 16,13) como un medio de darle un sentido a la salvación que se nos ofrece.
El estudio de la Biblia, no sea terminado, cada época el hombre tendrá la misión de buscar en ella el mensaje escondido en los libros sagrados y ponerlo al alcance de todas las personas.
Los libros que forman la Biblia, se escribieron hace mil o más años en Hebreo y en Griego, de allí se han traducido al español y a otros idiomas, hay una traducción que no es fiel a los textos originales, es la de los Testigos de Jehová, porque dice lo que a ellos les conviene y se olvidan que fueron escritos en otro tiempo diferente al nuestro y por otras personas.
Cuando afirmamos que es Palabra de Dios, no es que Dios la haya dictado, sino que a través de palabras escritas por los hombres Dios nos habla, porque tienen mensajes de Dios, que son válidos para nosotros.
La Biblia es una compilación de lo que en un principio eran documentos separados (llamados "libros"), escritos primero en hebreo, arameo y griego durante un largo periodo de tiempo y después reunidos para formar la Torah, el Antiguo Testamento para los cristianos, y luego el Nuevo Testamento. Ambos testamentos forman la Biblia cristiana. En sí la Biblia fue escrita a lo largo de aproximadamente 1000 años (900 adC - 100 dC).
Canon Bíblico.-
Un canon es el conjunto de libros que forman la Biblia y se les considera "divinamente inspirados" y los distingue de otros textos que no se consideran revelados. Estas diferencias entre las distintas ramas del cristianismo se dan únicamente para el Antiguo Testamento, ya que todas las Biblias tienen el mismo número de libros en el Nuevo Testamento.
La Biblia que conocemos hoy fue reunida por primera vez en el Concilio de Hipona en el año 393 de nuestra era. Dicho canon de 73 libros (46 pertenecientes al llamado Antiguo Testamento, incluyendo 7 libros llamados actualmente deuterocanónicos que no son reconocidos por el canon judío: Tobías, Judit, 1 y 2 Macabeos, Sabiduría, Sirácida y Baruc, ni valorados igual que los canónicos por el protestantismo, y 27 al Nuevo Testamento) fue confirmado en el Concilio de Cartago en el año 397 y nuevamente confirmado por decreto en la cuarta sesión del Concilio de Trento del 8 de abril de 1546 (este último válido sólo para los católicos romanos).
Tradición Oral.-
Los textos de la Biblia, en un principio, como la mayoría de la gente no sabía leer ni escribir (en ese tiempo aún no existía la escritura), la historia (memoria viva) del pueblo se transmitía oralmente, es decir las narraciones importantes se transmitían de padres a hijos mediante cuentos o historias; esto permitía que en el futuro se conociera el pasado. La escritura es después como una respuesta al peligro de perderse la historia se comienza a escribir.
División.-
El Antiguo Testamento narra principalmente la historia de los hebreos a la luz de la fe; el Nuevo Testamento la vida, muerte y resurrección de Jesús, su mensaje y la historia de los primeros cristianos.
El Nuevo Testamento fue escrito en lengua griega Koiné. En él se cita con frecuencia al Antiguo Testamento de la versión de los Setenta, traducción al griego del Antiguo Testamento realizada en Alejandría en el siglo III adC.
En la Biblia cristiana, la Biblia hebrea es llamada Antiguo Testamento, para distinguirla del Nuevo Testamento, que es la parte que narra la vida de Jesús y su predicación, entre otras cosas. El Nuevo Testamento está dividido en los cuatro Evangelios, Historia (Hechos de los Apóstoles), las Cartas a iglesias cristianas por San Pablo y otros apóstoles, y el Apocalipsis.
Actividades:
Actividades:
1. Debes formar tu grupo de trabajo y preparar un tema: Pentateuco, Profetas, Sapienciales, históricos, poéticos, evangelios para exponerlo en clase.
2. En tu cuaderno de trabajo mediante un grafico describe el contenido de la Biblia, división y los libros que la componen.
1 comentario:
Trabajo de religion
Hecho por:
-Maverick Brandont Condori Condori
-Henry Apolinar Jara Olarte
seccion:Fray Francisco Salas
El dei verbum
Traza, por una parte, una economía de la Palabra de Dios, que se manifiesta en la historia de la salvación que culmina en Jesucristo, Palabra de Dios, se expresa en la proclamación apostólica y se entrega a la Iglesia. Por otra parte, traza una economía de la Sagrada Escritura, que, inspirada por Dios, es testimonio de la revelación de Dios y, en la Iglesia, expresa la palabra de Dios. H artículo examina esta cuestión en Dei Verbum y en las explicaciones de la inspiración de la Sagrada Escritura que se dieron a lo largo del siglo XX.
Palabras clave: Dei Verbum, Sagrada Escritura, Inspiración.
La constitucion
del dei verbum
La Constitución Dogmática Dei Verbum ha supuesto un cambio a la hora de considerar el lugar de la Sagrada Escritura en la Iglesia, especialmente por su presencia en tres campos: la liturgia, la enseñanza y el diálogo ecuménico. Éste es un juicio que, más o menos, comparten los investigadores católicos
El Concilio lo repite más de una vez (cfr. Dei Verbum, nn. 9 y 24), que la Sagrada Escritura es palabra de Dios por estar inspirada por el Espíritu Santo. Desde hace muchos siglos, pero especialmente a lo largo del siglo pasado, la teología se ha esforzado en intentar elucidar en qué consiste específicamente la inspiración de la Sagrada Escritura. En estas páginas, al hilo de la reflexión teológica sobre la inspiración antes y después de Dei Verbum.
La interpretacion del dei verbum
La inspiración y la interpretación de la Sagrada Escritura son el objeto específico del capítulo tercero de Dei Verbum. El capítulo consta, como se sabe, de tres números: el n. 11 , el n. 12 , y, finalmente, el n. 13 , todos tratan de la encarnación de nuestro señor Jesucristo .
El párrafo consta de tres frases. La primera relaciona la revelación contenida en la Sagrada Escritura con su inspiración, en concreto afirma que la inspiración se ordena a consignar por escrito la revelación. La novedad de la afirmación conciliar es que sugiere que la inspiración no debe entenderse como una acción de Dios dirigida a hacer de la Escritura un acontecimiento novedoso de la revelación porque dios ya nos decía a través de las personas que predican la palabra de dios
En consecuencia, se podría afirmar que la inspiración del dei verbum, es un carisma ordenado a poner por escrito verdades reveladas, es decir, el significado de los acontecimientos que constituyen la revelación de de nuestro señor jesucristo.
Parrafo n.11
Primero, dice que la inspiración debe concebirse en orden a la escritura de la revelación
Segundo, en continuidad con el Concilio Vaticano I y con todo el Magisterio, recuerda que debe tenerse a Dios en las escrituras
En el antiguo Testamento trata el capítulo IV de la Constitución. Después explica cómo Dios se reveló a su pueblo, Israel, con hechos y palabras, y cómo el pueblo experimentó la revelación a él . Dicho de otra forma, lo que se describe aquí es la parte de la economía de la salvación que se expone en los libros del Antiguo Testamento.
Concluciones
el dei verbum habla sobre la revelacion de cristo en eso concluimos
Publicar un comentario